La imagen del hogar, los amigos/as, los vecinos, el Territorio en si, iba quedando atrás, mientras los vehículos avanzaban kilómetro a kilómetro.
En los ojos de las mujeres y niños se podía ver la ilusión que les causaba descubrir “la tierra prometida”.
Ha quedado grabada en nuestra mente, la imagen de niños y niñas de 3 a 12 años que junto a sus padres, preparados con sus pocas pertenencias a la orilla de la carretera, esperaban la llegada de los buses, eran las 2 de la madrugada del día 5 de agosto del presente año, fecha en que el gobierno, a marchas forzadas, se comprometió a trasladarlos a su nuevo hogar ubicado en el municipio de Cobán, a más de 200 kilómetros de su tierra natal, Panzós, Alta Verapaz.