Cuando salió el sol con sus rayos brillantes, un 15 de abril de 1978 y los campos se llenaron de flor, en medio de la obscuridad de los tiempos del dolor, muerte y terror, nació el Comité de Unidad Campesina -CUC-, formado por campesinas y campesinas, indígenas y mestizos pobres que, tal como lo narra el Pop Vuh, juntaron sus ideas, sus pensamientos con su cabeza clara y su corazón solidario para dar la luz a una nueva forma de organización y lucha de las comunidades que han resistido y luchado por más 500 años.
Campesinas y campesinos del norte, del sur, de oriente, de occidente, de los 4 puntos cardinales nos encontramos para analizar y enfrentar las desigualdades y las injusticias impuestas por el sistema que explota, esclaviza y ha cometido genocidio contra nuestros pueblos.
Han pasado 45 años desde que ese primer rayo de luz llego a los pueblos en la búsqueda de soluciones; sin embargo, los sectores de poder empresariales, gobiernos y políticos no han permitido avances significativos, frenando nuestras propuestas criminalizándonos, persiguiéndonos penalmente, manipulando el sistema a su favor; utilizando la corrupción e impunidad y el impulso de un paquete de leyes regresivas que afectan a las comunidades, pueblos, hombres y mujeres que buscamos una vida mejor para todas y todos.
Uno de los objetivos primordiales del CUC, ha sido la recuperación de la tierra y territorio como un bien común, para la búsqueda del buen vivir, basados en la práctica ancestral de uso, tenencia y productividad de la tierra; sustentados en el sistema milpa, cuidado del agua, la rotación de los cultivos y cuidando de la sagrada tierra, bajo el principio de que somos hijas e hijos de la tierra; somos Aj ral ch´och´ y nuestro deber es cuidarla, protegerla y garantizar la alimentación familiar.
En nuestros pueblos, existe el principio de la complementariedad, la intergeneracionalidad y el equilibrio entre seres humanos y la madre naturaleza; por ello la participación de hombres, mujeres, juventudes, niñez y el respeto a nuestro entorno ha sido un pilar fundamental en estos 45 años, para enfrentar los retos y desafíos, ante la imposición de un sistema patriarcal, colonial, racista y excluyente; sin embargo, hemos avanzado en la participación real de mujeres en las diferentes estructuras locales, regionales y nacionales,
En el CUC hemos impulsado y promovido el cambio de la producción impuesta basada en un sistema de muerte, a través del uso de agroquímicos a un sistema de vida y protección de la madre tierra a través de la producción agroecológica. La teoría de campesino a campesino, impulsado por campesinos Kaqchiles ha sido el bastión en la política del CUC.
Consientes que la lucha se lleva a cabo desde el campo y la ciudad, en el CUC, desde nuestros orígenes hemos buscado solución a las problemáticas sectoriales, nacionales e internacionales Hemos construido y participamos en articulaciones y alianzas con otras expresiones del movimiento popular; por ello actualmente formamos parte de la Coordinación y Convergencia Nacional Maya Waqib’ Kej y de la Asamblea Social y Popular –ASP-; a nivel internacional somos parte de la CLOC/VIA CAMPESINA, ALBAMOVIMIENTOS y de la Asamblea Internacional de los Pueblos, y en su caminar hemos sido parte de otros procesos organizativos del pasado como el Comité Nacional de Unidad Sindical -CNUS-, El Frente Democrático contra la Represión, la Unidad de Acción Sindical y Popular -UASP-, la Campaña de los 500 Años, espacio que promovió y postulo a la Hermana Rigoberta Menchu como Premio Novel de la Paz; la Asamblea de la Sociedad Civil, la Coordinadora Nacional de Organizaciones Campesinas -CNOC-, el Movimiento Indígena, Campesino, Sindical y Popular -MICSP-, y otros más.
Han sido 45 años, en donde se han tenido grandes logros pero también sufrimientos, en este caminar; no todo a ha sido caminos blancos y planos, también hemos transitado por el Qeq B’e, (Camino Negro), caminos de pesar, dolor, angustia en ese trayecto donde se han ofrendado vidas de hombres, mujeres, niños que, en la defensa del territorio, se les arrebató la vida al ser asesinados por este sistema opresor, que ha privilegiado a las empresas de muerte sobre la vida de nuestras comunidades; por ellos, reafirmamos que ellas y ellos nos enseñaron el camino, sus huellas jamás se borraran
Hemos vuelto una y otra vez, como lo hicieran Hun Ajpu e Ixbalamke, quienes bajaron a Xibalba a combatir a los señores de la Muerte, (Jun Kame y Wuq’ub’ Kej) quienes en su afán de acumular poder, generaron dolor y muerte; por ello desde el CUC, desde hace varios años hemos generado iniciativas de unidad, debate político, análisis e iniciativas que buscan construir la unidad amplia que permita defender el contenido de los acuerdos de paz, la lucha contra la corrupción e impunidad y la participación política hacia la construcción de un Estado Plurinacional y el Buen Vivir.
En estos 45 años, quienes han jugado un papel protagónico, han sido las comunidades, familias, compañeras y compañeros que forman parte de nuestra organización; por ello saludamos a las comunidades de base, estructuras a distinto nivel, integrantes y colaboradores del CUC, que con su esfuerzo, lucha, dignidad y sentido de comunidad y disposición de victoria, nos han fortalecido y nos ha permitido caminar en este espiral de múltiples colores. Asimismo, saludamos en este 45 aniversario a nuestros aliados nacionales: sindicatos, organizaciones campesinas, pueblos indígenas, estudiantiles, organizaciones de mujeres y organizaciones feministas, agrupaciones de jóvenes, cristianos comprometidos con su pueblo, académicos y artistas, así como a las organizaciones internacionales hermanas, aliadas y amigas, quienes han confiado en nuestro transitar y en nuestras propuestas las cuales fortalecen la internacionalización de lucha y las esperanzas por un mundo mejor en función de un buen vivir colectivo.
“No nos olviden, no nos desamparen y vuelvan al lugar de dónde venimos”, con este pensamiento de nuestros abuelos, llamamos a reflexionar que ningún cambio de trasformación será posible sin la unidad. Por eso nos comprometemos a revisar y potenciar nuestro trabajo interno; a seguir contribuyendo a la unidad, la articulación y alianzas para la defensa de los fundamentales derechos individuales y colectivos, así como la perspectiva estratégica de luchar por el Buen Vivir a través de la Construcción de un Estado Plurinacional.
Llamamos a no votar por personas corruptas, explotadoras, violadoras de los derechos humanos y que ofrecen regalos o dinero para comprar el voto. Para los cargos públicos debemos votar en las próximas elecciones por las mejores personas, honestas, honradas, con una trayectoria de defensa y compromiso con los derechos del pueblo para construir la verdadera democracia, la justicia y el pleno respeto a los derechos humanos.
CABEZA CLARA, CORAZÓN SOLIDARIO Y PUÑO COMBATIVO
Iximulew, 15 de abril 2023