Incrementar el pasaje al transporte colectivo sin que alguna autoridad competente la autorice se entiende como “abuso o imposición de poder” departe de los dueños de esos vehículos.
El descaro de los autobuseros es que cuando algún ciudadano reclama ese incremento despiadado o simplemente pregunta el motivo del mismo, el ayudante o “brocha” le responde con palabras soeces y lo invita a bajarse de la unidad o lo manda a pagar taxi.
El incremento antojadizo al pasaje lo hemos padecido la mayoría de guatemaltecos y guatemaltecas pero ahora ese abuso de poder lo vivieron los habitantes de las comunidades del municipio de Coatepeque del departamento de Quetzaltenango quienes se vieron obligados a hacer acciones sociales para presionar a los empresarios y a las autoridades municipales para que el pasaje no fuera incrementado de Q3 a Q5.
El lunes 11 de los corrientes unas 600 personas de 10 comunidades de Coatepéque cerraron el paso vehicular en la ruta hacia el caserío Pacaya, al mismo tiempo buscaron eco a sus demandas en la municipalidad, la Procuraduría de los Derechos Humanos y otras instancias locales, logrando acordar una reunión con empresarios y el consejo municipal que se llevó a cabo el jueves 14 de febrero.